Grupos políticos

*Recordamos a todos los usuarios que formar parte del FDUC no es sinónimo de ser purista y que militar en el MOR tampoco es el equivalente de ser pro-muggles. Las ideologías sobre la sangre pueden o no formar parte del movimiento político; pero recuerden que después de la Segunda Guerra las luchas por la superioridad de la sangre se atenuaron y se escondieron debajo de la alfombra. Para complementar la información dada en este post pueden recurrir aquí.



El líder del Frente de Unión Conservador es Draco Malfoy. La mayoría de los miembros de este partido político son magos de sangre pura, amante de las tradiciones y de ideales conservadores. Tienen la idea de que el gobierno debe ser pequeño y que debe posicionarse con firmeza frente a las problemáticas sociales. Defienden la importancia de regular el comportamiento moral del pueblo, preservar las costumbres mágicas y alimentar el nacionalismo. No creen demasiado en las políticas de apertura internacional (ni hacia el mundo muggle) y defienden que el Ministerio de Magia inglés debe autorregularse. Piensan que en la sociedad de su país los roles de cada quien están dados y que la forma en que está constituida es la correcta y que no necesita ser cambiada.

Apoyan firmemente la idea de que el Ministerio debe intervenir en Hogwarts, tanto para elegir los profesores de todas las asignaturas; como controlando de manera rigurosa los programas de clase. Hacen hincapié en la importancia de enseñar a los jóvenes magos materias como Historia de la Magia y Clases de Duelo. La educación es fundamental en su escala de valores; sobretodo porque de esa manera se puede inculcar el amor por las tradiciones y costumbres mágicas. Entre sus argumentos más defendidos se encuentran la importancia de que los Dementores vuelvan a vigilar Azkaban y que vuelva a aplicarse como pena El Beso. Medidas que fueron erradicadas luego de la Segunda Guerra a causa de los proyectos de Ley propuestos por Harry Potter y Hermione Granger. Así también como defienden la idea de que los puestos de trabajo deben ser ocupados por personas, y no por criaturas mágicos como los duendes de Gringotts, vampiros o semi-húmanos, como los semigigantes u hombres lobo. Miembros más radicales de partido apoyan la idea de exterminio de todo ser mágico que pueda resultar peligroso.

Actual, cuatro miembros del FDUC se sientan en el Consejo de Brujos. Entre ellos el líder del Partido, un Nott, un Zabini y un Parkinson. Es la primera vez que se consigue que tantos reliberantes formen parte del Parlamento del Mundo mágico; con los nuevos sucesos que han acaecido en Inglaterra, muchas personas se han inclinado hacia las ideologías que defienden en el FDUC.  



El líder del Movimiento de Orientación Reformista, y actual Ministro de Magia, es Percy Weasley. La mayoría de los miembros de este partido político son personas que creen en la igualdad de la sangre y que lucharon en el bando de Harry Potter durante la Segunda Guerra. Los liberacionistas, al contrario que los reliberantes, se muestran contrarios a regular asuntos de carácter personal, como la moral y las costumbres del pueblo. Este partido está a favor de las luchas sociales, y del establecimiento de medidas de bienestar social, en especial con la población minoritaria del mundo mágico. Abogan por el desarrollo de los derechos individuales, y a partir de estos, el progreso de la sociedad. Evitan participar en conflictos y buscan resolver los problemas a través de diferentes organismos de mediación, entre ellos la Confederación Internacional de magos.

Apoyan un mundo mágico donde todas las personas  sean iguales ante la ley, sin privilegios ni distinciones, en acatamiento de un mismo marco mínimo de leyes que resguarden las libertades y el bienestar de las personas. Defienden las políticas integracionistas: no sólo de criaturas mágicas parcialmente humanas, tales como los hombres lobo y los vampiros, sino también de las criaturas mágicas en toda extensión de la palabra como los duendes, los elfos domésticos y los centauros. También apoyan a los Squibs que piden un trato más justo y menos marginal en la sociedad mágica;  promueven la abolición de toda ley que beneficie a los sangres pura. Apoyan la diversidad, el activismo social y la igualdad. Persiguen y denuncian todo tipo de corrupción; incluso dentro de los mismos ejes del partido. La característica de los Liberacionistas son sus fuertes campañas para detener del contrabando y el fraude. Las malas lenguas dicen que son un poco paranoicos al respecto; pero últimamente se han registrado muchos accidentes con varitas e ingredientes para pociones de muy baja calidad. Tienen una opinión positiva de  la apertura hacia el exterior, e incluso, se debaten entre algunas de las facciones del partido cuales serían los pros y los contras de comenzar a relacionarse con los muggles. No son tan rígidos en lo referente al Estatuto Secreto de la magia como sí lo son los reliberantes.



Un pequeño grupo de liberacionistas de extrema. Creen en el fracaso del sistema para buscar la igualdad y recurren a la violencia física y psicológica para desbaratar a la oposición. Son los responsables de los ataques callejeros a miembros de las familias que son consideradas puras. También recurren a los secuestros, a la difamación mediática y a la extorsión para lograr sus objetivos. Tratan de operar en secreto y sin que otros miembros del partido intervengan en sus operaciones.



Las leyendas y los mitos sobre la Órden de Walpurgis se han trasmitido de boca en boca durante siglos en la comunidad mágica, no sólo en Inglaterra, sino en toda Europa. Nadie sabe si existieron de verdad o si no son más que otro cuento para picar la curiosidad de los conspiracionistas. Se dice, se rumora, que es una asociación secreta de magos prodigios, de carácter filosófico, basada en un fuerte sentimiento de fraternidad. La búsqueda de la verdad, la evolución de los magos, el progreso social y el conocimiento son sus supuestos objetivos. Son fervientes defensores de que el pueblo es incapaz de elegir lo que le conviene; después de todo, el don de ver el mundo con objetividad les ha sido concedido a unos pocos privilegiados que tienen que velar por el bien común. Abogan por la racionalidad, la muerte de las emociones y la ausencia del sentimiento. Según las habladurías, están infiltrados en todos los estamentos del gobierno, en todos los partidos políticos y manipulan los hilos de la historia mágica a su antojo. Tienen la habilidad de generar guerras, caos y enemistades con mucha facilidad; están ajenos a las luchas de sangre, sí, pero piensan que la existencia de los muggles es perjudicial para la paz y el equilibrio de la tierra. No sólo porque gracias a ellos se enfrentan los magos entre sí-que deberían funcionar como un todo indivisible- , sino que además destruyen el mundo con sus disputas irracionales. Los Misones han estudiado durante siglos a los seres no mágicos. El porqué es un enigma. Las fuentes más fiables aseguran que esta conducta estaría motivada por el ansía de encontrar una manera de controlarlos o de erradicarlos. Los cuentacuentos prefieren darle matices retorcidos a la leyenda y añadir que capturan muggles y squibs para realizar experimentos crueles con ellos. Las malas lenguas, por otro lado, aseguran que los exponentes de esta organización secreta son los representantes políticos más conocidos de Europa, los dueños de los medios de comunicación y los Magos y Brujas famosas.

La Orden de Walpurgis, afirman, es también  una organización internacional, a gran escala, que une a varios países y que interviene desde la sombras en los procesos históricos.  Los misones o Magnos se organizarían en estructuras de base denominadas logias (que son locales y nacionales), que a su vez, tienen una jerarquía intrínseca. No se sabe mucho de este funcionamiento interno: sólo que obedecen a un Círculo de Brujos formado por representantes de varias nacionalidades. Este Círculo de Brujos es elegido por voto unánime de todos los miembros de la Órden que tengan el rango de Maestros. Los magos considerados Maestros son personas de edad avanzada, además de tener una probada sabiduría, fidelidad a la Órden y aptitud para el mando. Ellos son los encargados de regular quienes se unen, de castigar a los Magnos que traicionan sus votos (juramento que hacen los aprendices en la iniciación) y de instruir a los nuevos en todas las Enseñanzas Avanzadas.

Los rumores dicen además, que los nuevos miembros, en el rito de iniciación, deben hacer un juramento inquebrantable de fidelidad eterna a la causa, que incluye dejar su vida pasada, todos sus amores y odios, para entregarse al forjamiento de un nuevo futuro y mantener el secreto. Luego de realizar los votos, pasan a ser iniciados: estos son instruidos por los Maestros en los misterios, la historia, los objetivos y los planes de la Organización. Lo que pasa después…nadie lo sabe a ciencia cierta. Algunos informes confidenciales del Departamento de Misterios que fueron filtrados luego del Accidente con el Velo-El Ministro de Magia afirma que es el pergamino que dejo algún bromista irrespetuoso luego de las muertes de los Inefables- dicen que los iniciados pasan a ser aprendices de diferentes ramas: los investigadores, el brazo de combate (o asesinos cambiarostros) y el ala de espionaje. Pero es información muy incierta, que no está comprobada. Un misterio. Cómo todo lo que rodea a la Orden de Walpurgis.




Apolítico es el término que generalmente se usa para designar a aquellas personas que se caracterizan por una despreocupación más o menos radical y constante respecto de las cuestiones políticas y las ideologías. Una persona apolítica es aquella que no encuentra interés en la política existente o no aprueba ninguna de las ideas políticas que conoce por lo que decide voluntariamente desprenderse de toda actividad política de su entorno. 'Cada ser crea su entorno, nadie nació con religión y política'.

El concepto apartidismo se refiere a la no pertenencia a un partido político. Cuando no se está de acuerdo con el sistema de partidos actual. Eso no significa, en ningún caso, apoliticismo. Es más, la mayoría de veces que alguien se define como apartidista es porque tiene una conciencia política y un interés por lo referido a ella. El apartidismo permite partir sin un posicionamiento preestablecido para alcanzar puntos en común, aquello que es bueno para todos, para cualquier ideología. La idea «es más lo que nos une que lo que nos separa»