Relaciones de Lucy L. Robinson

Lucy y Blair, Blair y Lucy…¿qué puede no decirse de este par? Han sido amigas desde el principio de sus años escolares, y la diferencia en sus Casas nunca ha sido un impedimento para que ahora puedan llamarse mejores amigas. Han pasado juntas uno y mil momentos, buenos y malos, excelentes y desastrosos, pero no se han apartado nunca una de al lado de la otra. Por supuesto que han tenido sus roces, algunos bastane fuertes, pero la amistad siempre ha prevalecido entre ambas, y la fuerza de esta es lo que la hace única. Blair es la máxima confidente de Lucy, quien sabe todos sus secretos y quien primero se entera de todo lo que le sucede. Si ha de consultar algo con alguien, Blair será la primera persona en saber sobre el problema que aqueja a la leona. Será también la primera en enterarse de sus triunfos, y sobre todo la primera en prestarle el hombro para llorar. Es la hermana que Lucy no tuvo de sus padres, y se sabe que tendrán una relación de por vida.

Otra de las primeras personas que Lucy ha conocido en sus años escolares. Freddie y ella se conocieron con éñ vendando su tobillo, puesto que acababa de torcérselo y necesitba asistencia. A pesar de que Lucy pertenezca a la Casa que a Freddie le desagrada, estos dos han mantenido una amistad fuerte y valiosa con el apso del tiempo, salvando sus diferencias a pesar de haber tenido también varios encuentros. Freddie es uno de los pilares más importantes de apoyo que Lucy tiene, dado que nunca le ha dado la espalda a pesar de que sus decisiones pudieran ser a menudo no las que él hubiera querido.  

Dylan es apenas mayor que Lucy, y primos como son, han crecido juntos desde el inicio de sus días. Quizá por ser los más cercanos en edad es que siempre han tenido muchas disputas, pero tal vez de los que más se han conectado, y es por esto que al momento de entrar a Hogwarts, pese a la sorpresiva elección de Gryffindor para Lucy, Dylan cambió su actitud hacia ella pero no drásticamente. Cambió su modo de concebirla, pasó a verla más débil o desfavorecida, quizá hasta menos merecedora, pero en ningún momento le dio la espalda, a pesar de no manifestar su apoyo. El tiempo dio paso a un  nuevo vínculo entre ambos, cuando su primo pasó a estar en una relación amorosa con la mejor amiga de la leona, y entonces también sintieron conectados sus círculos de amistades, que hasta entonces se habían mantenido distantes. Se ven a diario, comparten clases, apuntes, profesores, y casi todas sus actividades, por lo que es casi como si fueran hermanos mellizos que simplemente viven en diferentes salas comunes y diferentes casas en verano, y que riñen mucho, pero no dista mucho de una relación de hermanos.

Esta debe ser sin duda una de las relaciones más importantes en la vida de la leona. Grisam ha sido su modelo a seguir desde que tiene memoria. Es uno de sus primos mayores, pero siempe ha estado ahí junto a ella y Dylan con su crecimiento y su vida, liderándolos en cierto modo, dándoles pautas a seguir. Durante años, Lucy soñó en que llegara el día en que los tres (ella, Grisam y Dyaln) se sentaran en una de las butacas e la Sala Común de Slytherin, ella con sus dos primos, su igual y aquel al que admiraba, pero al momento de la selección, con ella en Gryffindor, sus esperanzas se vinieron abajo. Y en un principio no se trató solo de eso, sino que también pareció venirse abajo la relación con su primo. En cierta manera, podría decirse que su máximo ídolo le dio la espalda, y una relación de hermanos pasó a ser una de palabras hostiles y malos intercambios durante un par de años. No queda claro el momento del quiebre de aquella relación de mal en peor, pero quizá fuera el momento en que su primo Dylan se encontraba desaparecido en que la relación comenzó a volver a ser como antes, o al menos en parte. A pesar de que ahora dista la cosa de ser como había sido a sus pocos años de edad, Lucy continúa viendo a Grisam como alguien a quien admirar, y daría lo que fuera por tenerlo siempre junto a ella. Él, por su parte, la protege y es en cierto modo la hermana menor que no tiene, aunque tal vez no lo conciba concientemente como tal.  

Estas dos primas nunca es que tuvieran una mala relación, simplemente no excesivamente cercana. Mientras que Lucy se codeaba más con su hermano menor, Gwen pasaba el tiempo con primas más mayores, de modo que no puede decirse que hayan sido compinches desde temprana edad. Sin embargo Lucy siempre respetó su silencio y Gwen nunca se manifestófuertemente en contra de su prima cuando la gran mayoría sí lo hizo, que es cuando cayó en Gryffindor. Sin embargo sí hay un evento que las une, yq ue mostró la fuerza de estas dos como familia, primas, su lazo de sangre y lealtad inquebrantable. Aquella fatídica noche en que el ex-novio de Gwen decidió atacarla en estado de borrachera se encontraban juntas, y fue con el esfuerzo conjunto que ambas lograron salir de una situación más que problemática donde, seguramente, alguna no hubiese salido con vida. El sacrificio mutuo fue notorio y ambas son conscientes del buen trabajo en equipo que realizaron, por lo que saben que pueden hacer una buena dupla si se lo proponen. Confían la una en la otra y se agradecen las ayudas entre ambas, aunque al final del día aquello quede en el silencio y las miradas con sentido encubierto.

Whitney y Lucy se encuentran separadas por un rango de edad bastante importante. Eso no quiere decir que no se aprecien y apoyen ampliamente de forma mutua. La pelirroja se manifestó de forma un tanto neutral respecto a la castaña cuando esta fue seleccionada entre los leones, pero aquello no impidió que la ayudara en un perfil más bajo cuando más lo necesitó. Como buena prima mayor, Whitney se preocupa por Lucy y no deja que salga lastimada si está en su mano el evitarlo. Lucy le ha pedido consejos sobre el Quidditch y ha intentado dejar en el pasado los numerosos incidentes que acontecieron frente a ella con la niña sobre la escoba y cayendo de ella.

La primera persona con quien Lucy habló en el colegio, y unade las principales causantes de que ahora esté involucrada en el Quidditch. Ann siempre ha acompañado a Lucy en su trayecto por el colegio, y le debe a ella, junto con Claire y Cristine, el sentirse cómoda en la Casa de los leones. Entre las historias a destacar de todas ellas se halla, por ejemplo, el “acoso” al profesor Oliver Wood, algo qu sin dudas quedará en la memoria de todas ellas. Podrán pasar mucho tiempo distanciadas, pero la amistad entre ambas es algo que no pierden en ningún momento.

Edward y Lucy se llevan bien, han pasado juntos desde el principio de sus años escolares y compartido muchas clases. Son buenos amigos, se llevan bien, pero la confianza entre ambos no es demasiado fuerte como para tratar temas profundos. Es decir, por más que disfrute su compañía, no es la persona a quien Lucy escogería para pasar una tarde de amigos, aunque posiblemente sí una tarde de estudio (?). En los últimos meses se han acercado un poco más debido a sus puestos de capitanes en el Quidditch, pero no es tampoco que sean especialmente unidos el uno al otro.

La relación entre estos dos es relativamente breve, ya que no hace mucho que ambos han comenzado a interactuar. Atom y Lucy chocaron desde el primer momento en que se vieron, sin saber que ambos eran amigos de Freddie Highmore. Choque tras choque, la relación de antítesis entre ambos fue definiéndose cada vez más hasta que el chico comenzó a percatarse de que sentía atracción hacia ella. Allí todo cambió tras una eventualidad en la que confesó sus sentimientos y comenzaron a llevarse de mejor manera, a pesar de que Lucy no corresponde a cómo el muchacho se siente respecto a ella. Busca que sean amigos, pero al mismo tiempo sabe que no es precisamente lo mejor para él el estar muy cerca de ella.

Regulus perdió un año entero en su escolaridad debido a sus incidentes de licantropía. A su regreso logró congeniar con Lucy dentro de su nuevo grupo de compañeros de curso y clases. La chica y él hicieron migas casi al instante, y han llegado a generar confianza de esas que pocas veces se ve entre dos amigos que se acercaron a edades como esa. Regulus es la causa de que Lucy haya conocido también a otros amigos que ahora puede decir que tiene, y constituye uno de sus apoyos fundamentales para sus momentos más difíciles, así como también él cuida de ella en todo momento. Se deben mucho el uno al otro, y se nota en sus comportamientos.

Estos dos se han conocido a mitad de sus estancias en Hogwarts. La diferencia de un año entre ambos hacen que el chico ve a Lucy algo así como una hermana pequeña a quien tiene que proteger y cuidar de los males que hay fuera, prevenir de realizar incoherencias y ayudar cuando sea necesario. Esto no quiere decir que no valore a la leona ni sea capaz de ver sus capacidades y poder de independencia, sino que tiene una visión respecto a ella que lo hace comportarse de esa forma. Ella lo aprecia un montón y ha llegado a tener mucha confianza con el muchacho tras haberlo conocido a fondo. Son años de compartir experiencias en la sala común, choques, reprimendas y apoyos lo que hace a esta relación de leones tan singular.

Otro más del grupo de amigos que Lucy conoció gracias a su acercamiento a Regulus estando en tercer año. Edgar es también un sobreprotector de la castaña, pero aún así Lucy siente mayor libertad estando con él que con los otros dos muchachos, quizá porque al ser Hufflepuff no comparten sala común y se siente un poco más liberada que con Regulus y William, quienes pueden hasta seguir sus pasos hasta que se vaya a dormir. No obstante eso no quita que también se preocupe y tenga el ojo avisor puesto en ella por cualquier cosa...aunque puede que detrás de él particularmente hayan otros motivos, pero eso Lucy no lo sabe. Se llevan muy bien, son amigos muy cercanos.

La relación entre Lucy y esta serpiente es muy particular. A través de incidentes del pasado ambas jóvenes han llegado a sentir mutuo desprecio la una por la otra. Que si el hermano de una, que si el lobo, que si me lo cuidó cuando no tenía ni que tocarlo...en fin, quizá el tiempo haya hecho que lo que verdaderamente llevó a hacer realidad ese odio fuera olvidándose. Pero estas dos jovencitas son mucho más parecidas de lo que en un principio consideraron, y a través de varias instancias han podido percatarse de ello. Ambas son fuertes, ambas han pasado por mucho, ambas valen la pena y no son ningunas cualquiera. Esta revelación ha hecho que interiormente cada una haya cambiado su pensamiento respecto a la otra, pero por diversos motivos (llamémosles orgullo, si hace falta poner nombres) no permiten que esto salga al exterior. Es decir que a pesar de que ambas interiormente se respetan e incluso me animaría a decir que se aprecian mutuamente, de cara al exterior y ellas mismas eso no es una realidad, sino que perdura el odio que manifestaron desde el principio. .